La práctica de ejercicio físico tras el trasplante: dudas más frecuentes
Una de las dudas más habituales que surgen entre los y las pacientes es si podemos practicar ejercicio físico tras un trasplante, si es beneficioso o si, por el contrario, será perjudicial para nuestro estado de salud. Ante todo, siempre debemos consultar con nuestro equipo médico, y, a ser posible, con especialistas de áreas como la fisioterapia o la medicina del deporte. Pero, en líneas generales, la práctica moderada de ejercicio físico es beneficiosa para el paciente tras el trasplante.
Eso sí, es muy importante introducir el deporte de forma paulatina en nuestro día a día, para adaptarnos progresivamente a él. Los primeros pasos deben ser muy leves, sin apenas intensidad y tomando muchas precauciones, y siempre bajo consejo médico.
Cómo comenzar a practicar ejercicio físico tras el trasplante
Podemos establecer varias etapas de adaptación paulatina:
- Tres primeros meses después del trasplante: podemos salir a caminar cada día, progresivamente, hasta llegar a un mínimo de 30 minutos diarios.
- Entre tres y seis meses después del trasplante: en esta etapa podemos aumentar gradualmente el tiempo que dedicamos a este ejercicio, de forma que sea entre 30 minutos y 1 hora cada día, a un ritmo tal que nuestra respiración se acelere, pero sin llegar a experimentar ningún tipo de sensación de ahogo. También podemos introducir algún otro tipo de actividad, siempre bajo recomendación e indicaciones de especialistas.
- Entre seis meses y un año después del trasplante: el objetivo en este periodo es mantener el ritmo, la intensidad y la frecuencia alcanzados en los meses anteriores. En esta etapa, siempre dependiendo de nuestro estado de salud y de las recomendaciones de profesionales, podemos caminar ya a una intensidad moderada o vigorosa e incluso introducir trabajo moderado de fuerza.
Pasado el primer año, en líneas generales, se puede valorar el inicio de actividades más intensas, pero siempre, insistimos, previa consulta médica.
Beneficios del ejercicio físico para las personas trasplantadas
Factores tales como la medicación inmunosupresora, necesaria tras el trasplante, y la posibilidad de una vida sedentaria hace que los pacientes trasplantados tengan riesgo alto de desarrollar comorbilidades, sobre todo cardiovasculares, algo que la práctica habitual de ejercicio puede ayudarnos a reducir.
La actividad física puede, de hecho, considerarse como una parte más del tratamiento posterior al trasplante, pero es importante hacerlo de forma adecuada, por lo que será el equipo médico quien nos aconseje la mejor forma de llevarlo a cabo, según cada caso particular.
Los beneficios son múltiples también a nivel mental, social y emocional, puesto que nos permite enfocarnos en una actividad en concreto, y, si se trata de actividades de equipo, conocer gente y socializar. En un artículo publicado en 2020 en la revista Liver Transplant, los autores señalan que las interacciones sociales y el trabajo en equipo involucrados en la práctica de actividades físicas de grupo pueden conllevar beneficios significativos para las personas trasplantadas en términos de autoestima y seguridad en sí mismas.
Entre los beneficios de la práctica de ejercicio tras el trasplante se encuentra también el fortalecimiento de nuestro sistema inmune, y, según el Dr. Antonio Ríos Luna, destacan los siguientes:
- Nos ayuda a recuperar la forma física que hayamos podido perder en la etapa previa al trasplante, ya que es habitual que buena parte de los pacientes no hayan practicado ejercicio en meses o años.
- Reduce los riesgos de desarrollo de enfermedades cardiovasculares, y de otras como diabetes o hipertensión.
- Puede atenuar los efectos secundarios de la medicación inmunosupresora.
La labor de las asociaciones de pacientes y sus actividades
La práctica de actividad física también forma parte de la vuelta a la rutina, de la adaptación a una nueva vida, y puede ser de gran ayuda para el proceso de habituación a los cambios que deberemos introducir en nuestro día a día.
Las asociaciones que forman parte de FNETH organizan en ocasiones actividades de ocio y deporte; contacta con la de tu comunidad y seguro que podrán ayudarte. ¡Recuerda! No estás solo/a.