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Entrevista a Julián Onjanguren, enfermero responsable de la Unidad de vacunación de pacientes pertenecientes a grupos de riesgo del área sur de Fuerteventura. Vocal de la Asociación Española de Vacunología (AEV).

 

¿Qué necesita saber la población con una enfermedad hepática sobre las vacunas?

Las personas con enfermedades hepáticas deben conocer que la vacunación es una medida preventiva fundamental para proteger su salud frente a las complicaciones que provocan ciertas enfermedades trasmisibles.

El hígado juega un papel fundamental en nuestro sistema inmunitario, ya que es el único órgano que produce una sustancia denominada anticuerpos opsonizantes, imprescindible para que se produzca la activación del sistema inmunitario del organismo ante una infección. Las personas con elevación de los valores de transaminasas tienen una producción menor de estos anticuerpos, por lo que su sistema inmunitario responde peor ante las infecciones.

Quienes padecen una enfermedad hepática crónica tienen mayor riesgo de sufrir complicaciones graves, acabar en la UCI o fallecer por enfermedades como la gripe, covid-19 o las neumonías que aquellas que no tienen alteraciones hepáticas. Sin olvidarnos del mayor riesgo de complicaciones si sufren una hepatitis A o hepatitis B.

 

¿Cuál es el papel de los profesionales de enfermería en la promoción y administración de vacunas en pacientes con enfermedades hepáticas? ¿Cómo reacciona una enfermera a las reacciones adversas a las vacunas?

El trato directo que tenemos los/as profesionales de enfermería con la población hace que seamos el estamento sanitario con el que más confianza llegan a tener los/as pacientes.

Jugamos un papel muy importante en la recomendación de aquellas medidas que mejoren la calidad de vida de quienes tienen una enfermedad crónica (alimentación adecuada, actividad física, descanso, sueño y como no, la vacunación). Tenemos que asegurarnos que los/as pacientes tienen al día su calendario vacunal y que están correctamente protegidos frente a esas enfermedades que pueden causarles complicaciones graves.

Las vacunas son seguras, los efectos secundarios más comunes (aproximadamente en una de cada diez vacunas que se administra) es que provoque ciertas molestias leves, como pueden ser malestar general, cansancio, dolor de cabeza o algo de fiebre. Estos síntomas son tratables mediante la toma de paracetamol (siempre y cuando la persona no tenga contraindicado este medicamento) y pueden durar hasta 2 días tras la administración de la vacuna.

Los efectos secundarios graves, tales como reacciones anafilácticas son extremadamente raros y en todas las consultas donde se administran vacunas están equipadas con la mediación necesaria para poder atender un hipotético caso de reacción alérgica grave.

 

¿Por qué es fundamental la vacunación en personas con enfermedad hepática crónica?

Las personas con enfermedad hepática tienen mayor riesgo de sufrir complicaciones graves frente a las enfermedades provocadas tanto por virus como por bacterias. Además de las nombradas anteriormente (gripe, covid-19 y neumococo) las personas con afectación hepática deben estar protegidas frente al virus de la hepatitis A y hepatitis B, ya que, si se sufren una infección por cualquiera de estos virus que afectan a las células del hígado, al estar este órgano ya dañado por la enfermedad crónica, existe un mayor riesgo de sufrir una hepatitis fulminante o un cáncer de hígado.

Con la vacunación, no solamente se va a proteger frente a las complicaciones que pueden generar estas infecciones, sino que también ayudarán a prevenir descompensaciones de la enfermedad de base que tenga la persona.

 

¿Cómo es el proceso para solicitar una vacunación con tu enfermera?

Solicitar la vacunación en el caso de personas con enfermedad hepática crónica es tan sencillo como pedir cita con su enfermera en el centro de salud. La enfermera, tras revisar el historial de vacunación, indicará qué vacunas se necesitan.

Ahora que estamos en plena campaña de vacunación antigripal y frente a Covid-19, estas vacunas son imprescindibles para prevenir las complicaciones graves en el caso de padecerlas.

Todas las vacunas que una persona con enfermedad hepática necesita se pueden administrar juntas, al decir juntas, me refiero a que se pueden poner el mismo día. Esto es importante saberlo para conseguir la mayor protección en el menor tiempo posible, y así evitar estar expuesto a enfermedades que mediante la vacunación se pueden evitar.

 

¿Cómo afecta una enfermedad hepática crónica al sistema inmunológico y cómo influye esto en la eficacia de las vacunas?

Como ya comentamos, las personas con enfermedad hepática crónica tienen una disminución en la producción de los anticuerpos opsonizantes, imprescindibles para la activación del sistema inmunitario.

Quienes han recibido un trasplante hepático van a tener que tomar un tratamiento inmunosupresor durante toda su vida para evitar el rechazo del nuevo órgano. Este tratamiento influye en la respuesta del organismo a las vacunas. Es posible que, en estos casos, quienes estén tomando tratamiento inmunosupresor, necesiten dosis adicionales de alguna de las vacunas para conseguir una respuesta adecuada ante las vacunas y alcanzar una protección óptima.

 

¿Qué beneficios adicionales pueden tener las vacunas en pacientes con enfermedades hepáticas, además de la protección directa contra infecciones?

Con la vacunación, al evitar infecciones potencialmente graves, hará que las personas puedan llevar una vida más activa y menos limitada, lo que contribuirá a mejorar la autonomía y el bienestar general, aspectos muy valorados por las personas que padecen cualquier tipo de enfermedad crónica.

En concreto, las personas que presentan una enfermedad hepática, en el caso de sufrir una infección por los virus de la hepatitis B o de la hepatitis A, tienen un riesgo mayor de desarrollar un hepatocarcinoma (cáncer de hígado) o una hepatitis fulminante que precisen de un trasplante hepático urgente para poder sobrevivir. Por esta razón es imprescindible la protección frente a estas enfermedades mediante la vacunación.

 

¿Qué estrategias puede usar un profesional de enfermería para asegurar la adherencia a los calendarios de vacunación en estos pacientes?

Es importante que la persona vulnerable que presenta una enfermedad hepática crónica o ha recibido un trasplante de este órgano, esté adecuadamente protegido frente a esas enfermedades, ya que son más propensas a sufrir complicaciones graves en el caso de padecerlas. Por eso, cuanto antes se proteja de manera adecuada a quien lo precisa, menor probabilidades habrá de sufrir consecuencias graves o de fallecer si se sufre cualquiera de estas enfermedades para las que existen vacunas.

Las vacunas son seguras y se pueden administrar varias a la vez, por lo que no debemos tener miedo a que nos administren varias vacunas el mismo día. Sin ir más lejos, esta semana en mi consulta, a un paciente que necesita ser protegido frente a varias enfermedades ya que había recibido un trasplante, le administré 5 vacunas el mismo día (hepatitis B, hepatitis A, neumococo, gripe y covid-19).

 

¿Cómo ha cambiado la vida de los pacientes, en los últimos años?

Gracias a los avances médicos, la vida de los pacientes hepáticos ha mejorado notablemente. Hay nuevas terapias antivirales, especialmente para la hepatitis C, las cuales han permitido reducir la carga de esta enfermedad e incluso curarla en muchos casos. El progreso en las técnicas de trasplante hepático ha aumentado la esperanza y calidad de vida para aquellas personas en estadios avanzados de la enfermedad.

A esto hay que sumarle la inclusión de las vacunas para prevenir infecciones y mejorar la protección inmunitaria, mejorando la calidad de vida de los pacientes, evitando hospitalizaciones y complicaciones graves.

La labor que las asociaciones de pacientes realizáis es fundamental para trasmitir esta información entre sus asociados, favorecer la prevención de enfermedades mediante la vacunación y promover hábitos que mejoren la calidad de vida de quienes padecen cualquier tipo de enfermedad crónica.

 

¿Qué importancia tienen las asociaciones de pacientes? ¿Qué papel pueden desarrollar ante la vacunación de pacientes hepáticos?

Las asociaciones de pacientes jugáis un papel fundamental en el apoyo y difusión de la información sanitaria entre la población. Defendéis los derechos de los pacientes, colaboráis con los profesionales sanitarios y promovéis la mejora en la calidad de vida de toda la comunidad.

En el ámbito de la vacunación, las asociaciones como FNETH jugáis un papel clave al informar y sensibilizar a los pacientes con enfermedad hepática sobre la importancia que tienen las vacunas como la de la gripe, covid-19, neumococo, hepatitis A y hepatitis B, en la prevención de complicaciones generadas por estos patógenos. El papel es clave para reducir las dudas y los miedos entre todos los miembros de la asociación.

Por todo ello, os animo a continuar con la labor tan maravillosa que realizáis desde FNETH promoviendo la mejora en la calidad de vida de todas las personas con patología y trasplante hepático.

Publicado en Blog, Fneth te entrevista